Sí, el cantante de Nirvana fallecido hace más de 10 años vuelve a ser noticia ya que sus cenizas han sido robadas. El fetichismo llega a límites insospechados y lo macabro aún más, porque por muy fan que se pueda ser del grupo ¿para qué quieres los restos de Kurt Cobain?
Tras su incineración una parte de esas cenizas fueron esparcidas y otra parte (las que han sido sustraídas junto a joyas y otros objetos de valor) estaban en poder de su mujer, la siempre controvertida Courtney Love. Ésta las guardaba en una bolsita rosa con forma de oso de peluche y un mechón del pelo de Kurt y que, al parecer, llevaba siempre consigo para sentir más cerca a su fallecido marido. Vale, esto también es muy tétrico y totalmente antiestético para el creador del movimiento grunge. Sinceramente, además de la horterada que me parece, para eso casi prefiero una bolsa del Carrefour, al menos es más práctico de llevar, las cosas como son.
Cortney ha confesado su gran disgusto por sentir que lo ha vuelto a perder y ha llegado a hablar de que tiene tendencias suicidas ante la posibilidad de no encontrarlas. Ahora, ya tiene otro motivo más para dar el espectáculo, aunque esta vez sea con más razón.
